viernes, 26 de diciembre de 2014

Saber escuchar

En las relaciones con los otros, puede llegar a ser un problema la dificultad de escuchar al otro. Te propongo tres puntos  a tener en cuenta para que tu mismo puedas reflexionar sobre tu capacidad de escucha.

  • ¿Escuchas y tratas de comprender su punto de vista, aunque inicialmente no estés de acuerdo?
  • ¿Escuchas sin estar pensando en otras cosas, o sin pensar en qué es lo siguiente que le vas a decir?
  • Además, ¿Tienes curiosidad y haces preguntas para entender mejor lo que te dicen?
Ten en cuenta que escuchar no significa estar totalmente de acuerdo, ni siquiera significa que puedas estar un poco de acuerdo y, desde luego, tampoco significa que te puedan hacer cambiar de opinión en contra de tu voluntad, pero si es una oportunidad para abrir horizontes en la medida en que quieras abrirlos.

viernes, 19 de diciembre de 2014

ANSIEDAD ¿ES SIEMPRE PERJUDICIAL?

Cada vez más se ha generalizado el término ansiedad, asociándose a enfermedad, a sufrimiento, es decir, se asocia a algo perjudicial para quien lo padece. Pero, ¿es siempre perjudicial?


La ansiedad es una especie de energía movilizadora y por tanto necesaria a cierta dosis. La ansiedad forma parte del deseo, de la ilusión, de la expectativa ante lo nuevo, es decir forma parte de la motivación humana que dirige el comportamiento para la consecución de los objetivos propuestos. Esta ansiedad sería una especie de excitación que indicaría que lo que está ocurriendo, la situación o la realidad que nos rodea no nos es indiferente.
La ansiedad también forma parte de los temores y los miedos, pero, aunque puede ser desagradable, no significa que sea perjudicial ya que en estos casos puede tener un sentido de auto-protección y supervivencia, ayudando a la persona a reconocer las amenazas y actuar en consecuencia, con mayor precaución, huyendo, buscando ayuda, etc.
La ansiedad pasa a ser perjudicial cuando por su intensidad o frecuencia llega a bloquear a la persona o la hace sufrir casi permanentemente. Es entonces cuando conviene consultar al especialista. 
Los síntomas de la ansiedad suelen ser variados como por ejemplo palpitaciones, sensación de ahogo, náuseas, sudar excesivamente, escalofríos, etc. De manera frecuente se pueden sentir alguno de estos síntomas frente a situaciones específicas sin que eso signifique que se padezca ningún trastorno de ansiedad